Bienvenidos

Bienvenid@s a mi blog. Ha sido creado por el mero hecho de querer contar sobre mis sueños, es una especie de diario de aquello que he podido recordar después de despertarme. Además, también compartiré otras experiencias, como reflexiones, historias de mi puño y letra, y otras cosas que ya iré pensando conforme avance este blog.
Aquí comparto mis sueños, algo que es íntimo para muchos, pero que yo he decidido hacerlo público para que me comprendáis y también os comprendáis a vosotros mismos. Quizás, alguno de los que lea el blog se verá nombrado en él, espero que nadie se sienta ofendido porque sólo se trata de eso, de sueños.
Espero que disfrutéis leyendo mi blog tanto como disfruto yo escribiéndolo. Un saludo.

miércoles, 29 de junio de 2011

35º sueño: 29 de junio de 2011

Llegaba con mi coche a la calle de al lado del Ayuntamiento y aparcaba mi coche. Del maletero sacaba un macuto con ropa deportiva y me quería vestir para salir a correr un rato por el pueblo, pero no tenía dónde cambiarme y me metía en el portón del edificio de al lado. Cuando salí ya cambiado me encontré con que me había dejado el maletero del coche abierto y alguien me había robado las zapatillas de deporte, aunque había dejado el reproductor de mp3. Al lado de ahí había una tienda de deportes y entraba allí, el dependiente me enseñaba unas zapatillas de correr mejores que las mías, y más bonitas, y me las daba gratis porque me habían robado las mías pero yo no las quería, le decía que yo quería las mías y salía de la tienda. En la puerta del portón del edificio donde me había metido a cambiarme había unas mujeres hablando y decían que se había metido un hombre allí con unas zapatillas en la mano, y que les daba miedo. Decidía entrar acompañado por las mujeres, la luz del portón no se encendía y cogí una linterna, enfoqué por todos lados y vi a un vagabundo sentado en el suelo, cubierto de sangre y en medio de un gran charco de sangre también. Me empecé a acercar y entonces el vagabundo abrió los ojos y me miró. Yo, asustado, salí del edificio corriendo.

martes, 28 de junio de 2011

34º sueño: 28 de junio de 2011

Me encontraba navegando con una barca por un río bastante ancho y en calma en medio de un bosque. Veía a lo lejos a Mónica y su familia y los saludaba, llevaba la barca hasta allí y empecé a hablar con ellos. Me dirigía a la "Universidad de Sabadell" y la madre de Mónica le pidió a ésta que me acompañara. Cuando íbamos por el camino, pasamos el medio de un mercado ambulante, Mónica coge una bolsa de basura vacía, compra unos botes enormes de comidas en conservas y los abre, entonces echa dentro de la bolsa de basura fabada, lentejas... todo mezclado. Yo le pregunto qué es lo que hace y ella me responde enfadada que tiene que hacerlo, que coja la bolsa y me calle. Así lo hago, y seguimos nuestro camino.

domingo, 26 de junio de 2011

33º sueño: 26 de junio de 2011

He soñado que me encontraba encerrado en una casa con otro chico y unos hombres no sacaban a un patio lleno de palés de madera y con una especie de portería al fondo. Esos hombres parecía que nos habían secuestrado y cogieron al otro chico, le dijeron que se pusiera delante de la portería y que, si paraba las balas que le iban a disparar, le dejarían con vida y se podría marchar. Dijeron que nos daban unos minutos para prepararnos y nos pusimos detrás de una caja a hablar, le dije al chico que me dejara ocupar su lugar y él accedió, me vestí con ropa negra y con una máscara de hockey a lo Jason de Viernes 13 y me puse delante de la portería. Empezaron a dispararme y conseguí parar todas las balas con las manos, entonces cuando acabaron cogí al otro chico y huimos.

jueves, 23 de junio de 2011

32º sueño: 23 de junio de 2011

He tenido dos sueños:

1º Me visitaba Mónica y se traía a sus amigos de Galicia para conocer mi pueblo y yo los enseñaba todos los rincones hasta altas horas de la noche. Mónica y yo intentábamos estar a solas muchas veces pero sus amigos nos interrumpían siempre y ese mismo día se fue sin poder darme un beso de despedida.

2º Estaba buscando algo de comer en mi armario y me encontraba dos de mis tappers que estaban en el congelador allí y además destapados, que se salía todo el caldo de dentro. Le pregunto a Fernando que por qué están ahí y me dice que es que no le cabían la cosas en el congelador y ha tenido que sacarlos.

domingo, 19 de junio de 2011

31º sueño: 19 de junio de 2011

En este día he soñado con la familia Winslow y que la casa donde vivían se volvía una casa inchable y se desinflaba, todo por culpa de Ritchy, éste se había ido a comprarse un helado y cuando vuelve la casa se había transformado en el supermercado Campos, y le echaban una reprimenda al nicho, pero la madre de éste lo defendía y acababa a tortas con el resto de la familia, tirando las estanterías de comida de paso.

viernes, 17 de junio de 2011

30º sueño: 17 de junio de 2011

Recuerdo haber soñado sobre mi hermano, que hacíamos una especie de expedición marina y allí nos enfrentábamos contra Gálvez, uno de mis profesores. Les decía que a pesar de lo que le hicieron a mi hermano, conseguí revivirlo unos años después de su muerte, y que ya nunca me separarían de él.

jueves, 16 de junio de 2011

29º sueño: 16 de junio de 2011

Hoy he tenido cuatro sueños:

1º Estaba dando una vuelta por la urbanización de noche y entonces oigo a unos vecinos comentar que estaba habiendo una oleada de robos en los pisos, por lo que decido irme a mi dúplex, y de camino veo un montón de casas con las puertas abiertas. Entro por la puerta de atrás y cuando voy a echarle la llave a la puerta principal veo al vecino de al lado sentado en su patio de la entrada con el portátil jugando, lo saludo y hablamos un rato. Nos ponemos a comentar el brutal accidente que ha tenido Massa en la Fórmula 1, me despido y decidimos hablar al día siguiente.

2º Sueño con una mujer que estaba dando una vuelta en medio de un bosque y se encuentra de repente cerca de un grupo de árboles extraños. Se pone en tensión y de repente algo la ataca. Lo esquiva y entonces ella se transforma en una especie de mujer-cobra, con lo que se mueve muy rápido, pero lo que la ataca consigue agarrarla por la cola. Se trata de uno de los árboles, que está vivo y se la acaba tragando entera. De ella sólo queda un panfleto en el suelo sobre un viaje a Brasil, que está escrito en portugués.

3º Recuerdo haber soñado con un perro que leía un periódico y le mandaban una misión secreta, como si fuera Pernie el Ornitorrinco.

4º Decidía comprarme un trombón y así impresionar a la gente con él pero no conseguía emitir ningún sonido, ni únicamente con la boquilla. Además, cada vez que soplaba me acababa quedando sin aire y me acababa asfixiando. Tampoco me sabía las posiciones de la vara, así que al final decidí pasarme al saxo tenor.

martes, 14 de junio de 2011

28º sueño: 14 de junio de 2011

Hoy he tenido dos sueños:

1º Me encontraba en algún lugar de Italia porque tenía que realizar una "misión" y en esos momentos me estaba escondiendo, aunque no recuerdo la razón. Me encuentro subiendo por una calle por una cuesta gigantesca y muy empinada, que parece una montaña. Cuando llego a lo más alto, veo que me están esperando dos mujeres disfrazadas de monja, una de ellas es una mujer vieja y bajita y además lleva una barba postiza. Me cuenta algo que necesito saber (aunque no sé el qué) y cuando acaban la mujer bajita me empuja haciéndome caer por la cuesta rodando, y acabo estampado al final en un montón de basura.

2º Estoy en mi piso con Fátima viendo en la televisión el cover de Cemetery Gates que le hizo Dream Theater junto a otros músicos y escuchamos el solo de Dave Mustaine y no nos gusta, decimos que es horrible, entonces aparece él en mi piso y nos pide disculpas pero el solo, que como recompensa nos va a hacer una pizza, y entonces empieza a preparar la masa, tirándola por los aires y esas cosas. Fátima y yo decidimos que queremos una pizza barbacoa y vamos a buscar los ingredientes. Yo llego, no sé cómo, hasta mi casa en Mazarrón buscando los ingredientes y entro en mi habitación a buscar unas cosas, y cuando salgo y paso por el comedor veo a Torbe y una chica grabando unas escenas porno bajo la atenta mirada de mis abuelos, que han venido a visitarnos. Vuelvo al piso y terminamos de hacer la pizza. Cuando está acabada, me parece tan bonita que le echo una foto y la cuelgo en Twitter.

viernes, 10 de junio de 2011

27º sueño: 10 de junio de 2011

Hoy he soñado que un catalán publicaba internet con las zonas buenas y malas de España. La "España buena" eran las dos Castillas, Cataluña y Galicia, y la "España mala" eran todas las demás, especialmente Murcia y Madrid.

jueves, 9 de junio de 2011

26º sueño: 9 de junio de 2011

He soñado que estaba en la universidad y acababa de salir de un examen, estaba haciendo fotocopias para otro examen que tenía más adelante mientras estaba mirando las posibles respuestas correctas junto a Sandra.

También he soñado que estaba en un capítulo de Bones (aunque más bien parecía el comienzo de un capítulo de Fringe) en la que un hombre mataba a la gente que había en un juzgado, yo lo estaba buscando para capturarlo y no lo encontraba, y el asesino me dejaba notas para burlarse de mí. Ya de noche y lloviendo decidía coger el coche para volver a casa y descansar.

domingo, 5 de junio de 2011

Callejón sin salida

En esta historia nos situamos en el callejón de una ciudad. El nombre de la ciudad no importa, y dónde está situado el callejón tampoco.

Es un callejón como otro cualquiera, con unos 5 metros de ancho por 40 de largo, en uno de los extremos hay una verja y junto a ella hay un contenedor. Y en medio de dicho callejón hay un hombre.

Se encuentra sentado, con la espalda apoyada en la pared, la cabeza contra el pecho, y doblada una de las piernas. Viste unos vaqueros y unas deportivas, lleva una camisa color azul claro, salvo por una mancha de color granate que contrasta con el resto de la camisa. Se encuentra en el costado izquierdo, y sobre esta mancha tiene apoyada la mano.

No recuerda cómo pasó, ni cuando ni por qué. Sólo recuerda algunos fragmentos: un hombre (no recuerda su aspecto) lo agarra por el brazo y lo arrastra al callejón, recuerda haber oído la palabra "cartera" y después recuerda al tipo salir corriendo. Después sólo recuerda hallarse sentado, mirándose la mano cubierta de la sangre que le ha manchado su camisa.

Debería pedir ayuda, él lo sabe, pero no puede levantarse, y ni mucho menos gritar. El tiempo juega en su contra y el sueño le está venciendo. Sabe que si se duerme nunca despertará, pero eso ya no le importa.

Esperando su final inminente, sigue con la espalda apoyada en la pared, la cabeza gacha y la mano apoyada en el costado. La pierna que tenía encogida se le acaba estirando porque ya no tiene energía para mantenerla en el sitio que hasta ahora había ocupado.

De repente, alza la cabeza, aunque no sabe de dónde ha sacado las energías para hacerlo. Algo le ha llamado la atención. Fija la mirada vacía al frente y observa algo. De repente, sonríe, y con un hilo de voz apenas audible, susurra: "Hola, hermanito".

25º sueño: 5 de junio de 2011

Me encuentro en la biblioteca estudiando con Sergio. Decido hacer un descanso y cuando salgo a la puerta me encuentro que estoy en la facultad de Educación, y mirando a las pistas deportivas. Veo, a lo lejos, a Marino jugando al tenis contra alguien que creo que es Pedro. Me acerco y no era pedro, sino un negro gigante de la tribu Masai, con su ropa tradicional, y Pedro se encuentra sentado al fondo de la pista, con una mesa y estudiando. Junto a él está Carlos, que está viendo las fotos del "accidente" que tuvo Pedro con el coche, cómo volcó el coche y cómo quedó destrozado. Me acerco a ellos y veo a Pedro escribiendo con la mano derecha, le preguntó por qué y me dice que todavía no puede utilizar la mano izquierda.

jueves, 2 de junio de 2011

Oscuridad

En medio de la oscuridad y del vacío, escucho un ruido que se me antoja muy lejano. Es un sonido agudo. Es mi móvil. Abro los ojos, aunque los párpados me pesan una tonelada. Poco a poco distingo el tenue resplandor de la luz del día a través de la persiana de una ventana que hay ante mis ojos. Me encuentro tumbado de costado en el borde de una cama, las sábanas están arremolinadas y apenas tapan mi cuerpo desnudo. Veo un brillo que va desapareciendo de forma progresiva encima del comodín que hay junto a mi cabeza. Cojo el móvil y miro el SMS que me acaban de mandar. “Gana 1.000€ contestando este SMS”. Publicidad o estafa telefónica, me importa bien poco. Elimino el mensaje y miro la hora. Las 12:30 del mediodía. La luz del móvil me molesta realmente los ojos.

Dejo el móvil sobre el comodín de nuevo y me estiro para intentar despejarme un poco. La cabeza parece que me va a estallar, anoche pillé una buena cogorza. Noto un ligero movimiento a mi lado. Miro y me encuentro con una mujer. El pelo castaño le tapa la cara. Se lo aparto para mirarle la cara. No es una chica muy guapa que se pueda decir, tiene los rasgos bastante marcados y la nariz aguileña. Además, está algo rellenita. Seguramente la conocí anoche cuando fui a tomar una copa al bar del final de la calle. Miro a mi alrededor, intentando observar la habitación en la que me encuentro, con la poca luz que se filtra a través de los orificios de la persiana. No es una habitación muy ostentosa, realmente es bastante sobria, con muebles clásicos de madera bien barnizados, color caoba. Decido levantarme. Sin hacer mucho ruido, me pongo los calzoncillos, los pantalones (hurgo en los bolsillos y allí se encuentra mi cartera, mis llaves y el paquete de tabaco), la camiseta y por último las zapatillas; después cojo el móvil y me lo meto en el bolsillo. La chica no se ha dado cuenta y sólo se ha movido un poco. Mejor, prefiero no hablar con ella.
Salgo de la habitación y recorro el pasillo hasta llegar al comedor. Aquí las persianas están subidas y las ventanas abiertas, entrando todo el ruido de la calle. La cabeza me va a estallar. Con los ojos entornados llego tambaleándome hasta la ventana, la cierro y echo las cortinas. Es un verdadero alivio, aunque pasajero. Cojo un cigarro y lo enciendo, doy unas cuantas caladas para relajarme. Me acerco al mueble-bar y saco una botella de J&B y echo dos dedos en un vaso que encuentro por ahí. Me lo bebo de un tirón. No hay nada mejor para quitar la resaca.

Noto movimiento por el rabillo del ojo y me vuelvo esperando encontrar a la chica. En la puerta no hay nadie. Me asomo para ver si está en el pasillo. También está vacío. Consternado y algo confuso, decido apagar el cigarrillo y salir a la calle.

Cuando salgo del edificio y me encuentro sobre la acera, me doy cuenta que esta zona de la ciudad apenas la conozco. Habré pasado apenas un par de veces desde que llegué. Le pregunto a un hombre que pasaba cómo llegar al centro. Sigo sus indicaciones. Paso al lado de una cafetería y me doy cuenta de que estoy muerto de hambre. Entro y me pido un sándwich mixto y una cerveza. Me lo zampo en un momento y me bebo la caña en apenas dos tragos. Pago al camarero y me doy cuenta de que apenas me queda dinero en la cartera. Anoche me gasté más de lo debido.

Decido atajar por el parque que hay al lado de la cafetería para llegar más rápido al centro. Paso por un puente que hay encima de un pequeño estanque y decido pararme a mirar un momento a los patos que nadan sobre la superficie del agua y a los peces que se encuentran debajo. Mientras observo el agua veo una sombra que se para a mi lado. Giro la cabeza y allí no hay nadie. Incrédulo, sacudo la cabeza para intentar aclararla. Esta resaca me está afectando demasiado, empiezo a ver cosas.

Atravieso el parque a paso rápido ya que me estoy sobrecogiendo un poco. Llego al centro y encuentro mi edificio. Entro por el portal. Dentro del edificio me siento observado, y no me puedo quitar esa sensación, puede que sea un vecino o que sean imaginaciones mías, no puedo distinguirlo. Subo por las escaleras de dos en dos. No me siento tranquilo hasta que atravieso la puerta de mi casa y la cierro. Ya en el interior me dirijo hacia el cuarto de baño. Miro mi reflejo en el cristal: ojos castaños, pelo oscuro a media melena, algo revuelto, y barba de dos días. Me lavo la cara para intentar aclararme las ideas. Cuando levanto la vista y me miro de nuevo en el espejo veo de nuevo la sombra reflejada en el cristal. Se encuentra detrás de mí. Giro rápidamente la cabeza y allí no hay nadie. Joder, me estoy volviendo loco. Cada minuto que pasa me asusto más y más. Decido ir hacia mi habitación y coger mi revólver. Sólo por precaución.

“Rain”. Es un leve susurro, pero puedo escucharlo con total claridad. La escucho resonar en lo más dentro de mi cabeza, y me hace estremecerme hasta los huesos. Me han llamado por mi mote, aquél que sólo conocen unas cuantas personas, y ninguna de las nuevas amistades que he hecho en esta nueva ciudad han oído jamás esa palabra salir siquiera de mis labios. Nervioso, miro a mi alrededor y no hay absolutamente nadie. Decido cerrar la puerta de mi habitación y apagar la luz. “Rain”. Lo escucho una vez más. “¿Quién es?” Le grito yo a su vez. Quiero que me deje en paz. “¿Por qué?” Me pregunta esa voz. Yo no entiendo lo que me quiere decir. Observo alrededor de la habitación, la mirada se dirige a cada rincón, noto que un sudor frío me recorre la espalda, y el vello de mi cuerpo se encuentra de punta. “¿Por qué lo hiciste?” Me pregunta una vez más.

Y entonces, se abre la puerta. Aparece una mujer alta y esbelta, con el pelo rubio y los ojos verdes. Es hermosa, pero su piel está demasiado pálida, de un color azulado, los labios están morados. Viste unos vaqueros y una camiseta de tirantes, va descalza. Tanto la ropa como el cabello están empapados, y están dejando una gran mancha de agua sobre el suelo.

Yo no puedo dar crédito a mis ojos. Es ella. “No puede ser que estés aquí –le grito-. Estás muerta. ¡Yo te maté!” Da unos cuantos pasos y se acerca al rincón en el que me encuentro. Nervioso, la apunto y le digo que no se acerque o disparo. “Sí, estoy muerta. Pero no es impedimento que esté aquí delante. Vengo a por ti.” Estoy angustiado. No puedo más. Le grito que me deje en paz y le disparo, pero las balas no le hacen nada. Solamente atraviesan su cuerpo y se estrellan contra la pared. Me quedo sin balas, pero no es problema. De mi bolsillo saco algunas balas más y, torpemente, las pongo en la recámara. Cuando levanto la vista, ella ya no está delante de mí. Noto un aliento helado en mi mejilla que me pone la piel de gallina y una voz que me susurra al oído: “Sólo hay una forma que desaparezca, y tú ya sabes cuál es”. Con las lágrimas recorriéndome las mejillas, levanto el arma y me apunto a la sien. Aprieto el gatillo.

Oscuridad…

24º sueño: 2 de junio de 2011

He tenido dos sueños:

1º Mi abuela quería que le preparara la carne al pisto como yo lo hago pero esta vez en vez de calentar el pisto en la sartén lo decido calentar en el microondas dentro del bote. Entonces el bote mientras se calienta empieza a producir chispazos azules y el microondas explota.

2º Me encontraba viendo un monólogo por la tele de una mujer que era clavada a Belén Esteban pero era negra, y enfocaban al público y entre ellos se encontraba Cervan, y se estaba riendo.

miércoles, 1 de junio de 2011

23º sueño: 1 de junio de 2011

He soñado 3 cosas distintas:

1º Me encontraba enfrente de la carpa de un circo, de color a franjas rojas y blancas, y sonaba una música de fondo. No podía distinguirla pero aun así podía sentir miedo.

2º Estaba barriendo mi habitación cuando salgo de ella y me encuentro en la guarida de Blade, y éste me pide que le prepare una nueva clase de suero porque casi no podía resistir más.

3º Me encuentro con Eva (compañera de clase) y me presenta una amiga suya, y quiere que me case con ella.